“Con las retretas seremos capaces
de recuperar una forma popular y hermosa de difundir y consolidar la música
boliviana, pero además con la retreta la gente camina, enamora y los niños
corren”, afirma Jenny Cárdenas, una compositora e intérprete de la música
popular boliviana.
Jenny Cárdenas es una apasionada
de las retretas. Ahora lucha por su reincorporación a la vida cotidiana en
Bolivia, tal y como era costumbre antaño.
La cantautora sostiene que la reincorporación de las retretas puede ser
una respuesta a la necesidad que tiene la sociedad, inmersa en un consumismo
muy superficial, de encontrar espacios espirituales y sociales de recreación.
“Imagínate, los jueves y los domingos, qué maravilla”, manifestó.
Para la tesis universitaria yo
quería hacer una investigación sobre la música de la revolución de 1952, pero
después me di cuenta que esa revolución era consecuencia de la Guerra del Chaco y decidí
investigar ese período. En medio de la investigación murió la hermana de uno de
mis abuelos, que era director de bandas. Entonces, heredé un montón de música,
inclusive desde 1870.
Te emociona hablar del tema, ¿no?
Todas estas cosas me emocionan mucho
porque creo que tenemos dentro de nosotros, a pesar de ser una generación
posterior al 52, una identificación con la cueca o con los boleros de
caballería.
Estás hablando como si la retreta
fuera parte de la cultura general del país …..
Yo creo que sí. Las retretas son
las que se han encargado de difundir la música. Se tocaba música clásica, de
ópera y al final los huayños y las cuecas. Era una forma de difundir la música
boliviana.
¿Y sus efectos colaterales?
El más importante efecto es la
fiesta. Con la retreta la gente camina, enamora, los niños corren, se recuperan
los dulces antiguos, las melcochas, los misquichados. Es, pues, recreación cultural
y social en base a la retreta.
¿Una respuesta al exacerbado
individualismo que nos invade?
Creo que todos tenemos una
necesidad enorme de una ruptura o de un espacio donde nos podamos volver a
encontrar a nosotros mismos. Es como que
nos enajenamos y entramos dentro del circo y cada uno está como loco en su
frenesí por su trabajo, la ciudad, el tráfico.
No es raro que en Europa se hayan vendido tantos discos de la música de
canto gregoriano y entre la gente joven.
¿La sociedad en la búsqueda de
espacios de recreación?
Así es. Hay una necesidad, enorme de espiritualidad
para llamarlo de alguna manera. Hay una
necesidad enorme de la sociedad de tener respiros pequeños. La alcaldía de Miraflores, en Lima, tiene una
programación diario de retretas. Frente
al Pacífico, en un café donde todos se sientan a conversar de política, hay un
redondel con tres gradas y al medio es como un escenario donde cada día actúan
diferentes artistas peruanos. La gente
que va ahí es gente que puede venir de los alrededores de Miraflores y la gente
popular que vive en los barrios, bailan sus valses y cantan con los artistas
desde las 4 de la tarde hasta las 7 de la noche.
En el caso boliviano las retretas
parecen más convocar a las clases medias ….
Eso se ha visto ahora último, con
un par de retretas en la plaza Murillo, pero yo creo que es un movimiento
popular. Eso trasciende cualquier clase y constituye un elemento fusionador.
¿Una suerte de alivio a esta
carga tan pesada que implica la llamada posmodernidad?
Exacto, definitivamente. Es una
locura.
¿Cómo se expresaría en este
período, donde muchas veces la computadora ha reemplazado a la Imaginación y la
creatividad ?
Me parece tan genial solamente el
figurarte que en las plazas, lo jueves a las 7 de la noche, empiecen a tocar
las bandas militares. Es una locura sólo el pensarlo. Realmente es como esta
arquitectura pos-moderna que te plantea una casa con unos pilares y unas cosas
clásicas en sus colores, y en medio de eso una retreta, con una banda de
uniformados. Además, las retretas vienen
de los ejércitos, y a nivel de las instituciones están planteando un
puente. Los ejércitos han sido fuerzas
de represión o de contención de las expresiones de la gente, pero en las
retretas amamos a los soldados que tocan.
¿La incorporación de la guitarra?
Una banda no necesita amplificación,
una banda es una masa sonora. Una guitarra
no tiene nada que ver con esa posibilidad, entonces solamente se puede plantear
esa posibilidad cuando hay micrófono.
Ahora, otra cosa distinta son las estudiantinas que tienen como base los
instrumentos de cuerdas. Sin embargo esa
posibilidad, la del cantor con la banda es emocionante, sobre todo para el
cantor.
¿Alguna experiencia personal?
Yo creo que todo esto también es
el resultado de una necesidad mía de hacerle un homenaje a mis padres. Hablé con la banda del Colegio Militar para
hacer un concierto de homenaje a la generación de la Guerra del Chaco. La banda tocaba, yo cantaba, el bailecito
tenía tres partes, la banca tocaba una y yo cantaba las dos partes.
Con la retreta, sin embargo, no
se gana plata ……
No se gana, para nada. Tiene que ser nomás el ejército que abra las
puertas para hacer eso y otra institución la que construya las rotondas donde
toquen las retretas. Imagínate, hasta estoy pidiendo rotonda (risas).
¿Estamos hablando de la
desmercantilización de la música o la creación de una nueva forma comercial?
Nunca he pensado en la cuestión
en términos de si es o no es comercial, pero creo que la música es una arte tan
temporal y es tan directo entre el público y el que toca, que en ese instante
ser realiza la magia. No sé si soy idealista, pero sería más idealista pensar
que la banda venda los compactos de la retreta (risas).
JENNY CARDENAS DE PERFIL
Jenny Cárdenas nació hace 40 años
en la ciudad de La Paz. A pesar de sus signo -Cáncer-, ella es una mujer que no se cansa
de soñar todos los días, como una forma de evitar ser arrastrada por la fuerza
de la rutina.
Su familia gravitó para que desde
niña sintiera una inclinación hacia la música.
Sus abuelos fueron compositores de música criolla y tiene un número
importante de primos que cantan y tocan muy bien la guitarra. Desde muy chica
me he enamorado de la guitarra, a los 9 años he descubierto la guitarra y creo
que es un instrumento hermosísimo, afirma con brillo en los ojos.
Desde entonces, el camino
transitado por Jenny sobre los pentagramas es largo, y está coronado por la
satisfacción de haber grabado varios discos y ser una cantautora reconocida a
lo largo y ancho del país.
Casada con el sociólogo Ricardo Calla, Cárdenas opina que, junto a
varios de sus compañeros músicos, siempre sintió una inclinación hacia el
–anarcomusicalismo-. Sin embargo, reconoce algunos aciertos del sistema, como la Participación
Popular , que considera como una medida importante, una
verdadera revolución pasiva, afirma Jenny al parafrasear a Carlos Hugo Molina,
el Secretario Nacional de la
Participación Popular.
No hay comentarios:
Publicar un comentario